Un vuelo de JetBlue desde Curaçao evitó una colisión con un avión cisterna de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos sobre Venezuela, destacando riesgos en la navegación aérea en la región.
Este casi accidente pone de relieve la tensión en el espacio aéreo del Caribe y las complicaciones que pueden surgir entre vuelos comerciales y operaciones militares. La seguridad en la aviación es crucial, y incidentes como este pueden tener repercusiones significativas en la confianza de los viajeros y las políticas de aviación en la región.