Donald Trump ha declarado el fin de la migración masiva y ha identificado a China como una amenaza central para la seguridad nacional de los Estados Unidos en un nuevo documento de política exterior.
Esta declaración marca un cambio drástico en la política de migración y seguridad nacional de los Estados Unidos, reflejando una tendencia hacia un enfoque más nacionalista y proteccionista. Además, la identificación de China como una amenaza puede influir en las relaciones internacionales y la política económica en los próximos años.