Donald Trump se convierte en el primer receptor del nuevo premio de paz de FIFA durante el sorteo de la Copa Mundial de la FIFA 2026 en Washington, D.C., un gesto significativo en medio de su búsqueda del Nobel.
Este evento simboliza la influencia de Donald Trump en el ámbito del fútbol mundial y su relación con FIFA, lo que puede tener implicaciones en la política internacional y en la percepción pública de su legado. Además, resalta la creciente intersección entre deporte y política en el contexto global.