La administración de Donald Trump ha impulsado un auge histórico del Bitcoin, alcanzando un récord de $126,296, lo que ha generado un gran optimismo en Wall Street y una adopción institucional sin precedentes.
Este evento marca un cambio significativo en la percepción del Bitcoin como activo de inversión, impulsando su legitimidad y popularidad. La adopción institucional podría transformar el panorama financiero, atrayendo más inversiones y alterando las dinámicas del mercado tradicional.